Qué hacer si tu perro tiene caca negra

El primer paso es observar a tu perro cuidadosamente. Mantén un registro de cualquier otro síntoma que pueda estar presentando, como vómitos, letargo, pérdida de apetito o dolor abdominal. 

Anota cuándo notaste el cambio en la coloración de las heces y cualquier otro comportamiento inusual.

Consulta a tu veterinario

La caca negra puede ser una señal de un problema grave, especialmente si está acompañada de otros síntomas preocupantes. 

Es fundamental que lleves a tu perro al veterinario lo antes posible. Lleva tus anotaciones y una muestra de las heces para que el veterinario pueda analizarla.

Tu veterinario probablemente realizará una serie de pruebas para determinar la causa de la caca negra. 

Esto puede incluir análisis de sangre, radiografías, ultrasonidos y posiblemente una endoscopia para observar directamente el tracto gastrointestinal de tu perro.

Tratamiento y cuidados

Cuando notas heces negras en tu perro, es importante actuar rápidamente para determinar la causa y aplicar el tratamiento adecuado. 

Aquí desglosamos los pasos y consideraciones que debes tener en cuenta.

Tratamiento de la melena

Si el diagnóstico indica que la causa de las heces negras es melena, el tratamiento dependerá de la condición subyacente que está causando el sangrado gastrointestinal. 

Aquí se detallan algunas de las intervenciones más comunes:

Úlceras gástricas

• Medicamentos protectores del estómago: Se pueden prescribir medicamentos como los inhibidores de la bomba de protones (omeprazol) o los antagonistas de los receptores H2 (ranitidina) para reducir la producción de ácido en el estómago y permitir que las úlceras sanen.
• Dieta especial: Una dieta blanda y fácil de digerir puede ser recomendada durante el periodo de recuperación. Alimentos comerciales formulados para perros con problemas gastrointestinales suelen ser una opción ideal.

Tumores o cáncer

• Cirugía: Si se detecta un tumor, la cirugía puede ser necesaria para extirparlo. La decisión de operar dependerá del tipo y la localización del tumor, así como de la salud general de tu perro.
• Terapias adicionales: En algunos casos, se pueden necesitar tratamientos adicionales como quimioterapia o radioterapia.

Infecciones

• Antibióticos: Si la causa es una infección bacteriana, tu veterinario recetará los antibióticos específicos. Es fundamental completar todo el tratamiento para asegurar la erradicación de la infección.
• Antiparasitarios: Si los parásitos intestinales son los culpables, se utilizarán antiparasitarios adecuados.

Trastornos de la coagulación

• Tratamientos específicos: Dependiendo del trastorno de la coagulación, tu veterinario puede administrar medicamentos para ayudar a la coagulación o realizar transfusiones de plasma.

Ajustes en la dieta y medicamentos

En ocasiones, las heces negras pueden ser el resultado de algo menos serio, como la dieta o los suplementos. 

Aquí te explicamos cómo abordar estos casos:

Cambios en la dieta

• Identificación de alimentos problemáticos: Tu veterinario te ayudará a identificar si algún producto específico está causando las heces negras. Esto podría implicar eliminar ciertos alimentos (cómo el hígado) o cambiar a una dieta diferente.
• Dieta blanda: Durante el periodo de observación y tratamiento, una dieta blanda puede ayudar a reducir la irritación gastrointestinal. Arroz blanco con pollo cocido es una opción comúnmente recomendada.

Ajustes en los suplementos

• Revisión de suplementos: Si tu perro está tomando suplementos, especialmente de hierro, es posible que tu veterinario te sugiera ajustar la dosis o cambiar a un suplemento diferente.
• Monitorización de medicamentos: Asegúrate de seguir las instrucciones del veterinario al administrar medicamentos y evita el uso de AINEs a menos que sean recetados específicamente.

Monitoreo continuo

El monitoreo continuo es una parte esencial del cuidado post-tratamiento. 

Aquí hay algunas recomendaciones para asegurar la salud continua de tu perro:

Observación de las heces

• Consistencia y color: Sigue observando la consistencia y el color de las heces de tu perro. Anota cualquier cambio significativo y discútelo con el veterinario.
• Frecuencia: Mantén un registro de la frecuencia con la que tu perro defeca y cualquier esfuerzo o dificultad que pueda tener.

Síntomas adicionales

• Vómitos y letargo: Estos síntomas pueden indicar que el problema no se ha resuelto o que hay una nueva complicación.
• Apetito y energía: Un cambio en el apetito o en los niveles de energía puede ser un indicio de que algo sigue mal.

Revisiones regulares

• Visitas al veterinario: Programa visitas regulares para chequeos y seguimientos. La comunicación continua con el veterinario es clave para manejar cualquier problema que pueda surgir.
• Pruebas adicionales: Tu veterinario puede recomendar pruebas adicionales de manera periódica para asegurarse de que el tratamiento está funcionando y de que no hay nuevos problemas.

Asegura tu mascota con Cacttus

Con Cacttus, el seguro de mascotas, puedes disfrutar de una cobertura integral que abarca desde diagnósticos, como exámenes de sangre y orina, radiografías y ecografías, hasta procedimientos más complejos, incluyendo hospitalizaciones, cirugías y urgencias. 

También cubrimos los medicamentos recetados y utilizados en la consulta y en cualquier veterinaria de Chile.

Además, nuestros paquetes preventivos te permiten ahorrar en el cuidado anual rutinario de tu mascota.

Con Cacttus, la cobertura es de principio a fin, asegurando el bienestar de tu compañero peludo. 

¡Cacttus, porque tu mascota merece lo mejor!

‍